En agosto puse las plantitas de brócoli y repollos del país. Ya es tiempo de cosecharlos, pero ha llovido poco y aunque hemos regado, como el agua de lluvia nada para que crezcan con salud.
Las plantitas de repollo del país eran demasiado pequeñas cuando las pusimos y les ha costado crecer. Ahora están empezando a cerrar. La cosecha de otros años fue magnífica pero la de éste se hace esperar. Además, tienen algún gusano que se come las hojas tiernas y ya veremos si nos deja uno sano para que lo probemos.
El primer brócoli ya en la cocina, dispuesto para hervirlo. Lo preparamos de dos formas: la más sana, con aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal, y la no tan sana, en tempura rociado con miel. De las dos formas está buenísimo.
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