Junio es ya un poco tarde pero aún así estamos a tiempo de enterrar los bulbos de dalias y gladiolos para disfrutar de sus flores en el verano.
Dalias y gladiolos son bulbos de primavera, los enterramos en primavera para que florezcan en verano. Los gladiolos siempre los recojo cuando acaba la floración. Los dejo de regar y cuando están secos los guardo en una caja separados por papel de periódico y los pongo en un lugar fresco.
Antes de volver a enterrarlos, los examino y desecho los estropeados o los que no estén prietos. Y planteo sobre el terreno la distribución, para que no se molesten unos a otros. También les coloco un tutor para cuando crezcan mantenerlos derechos. Este año he cambiado la ubicación porque donde estaban el año pasado se inundaban con facilidad y no quieren demasiada agua.
Para algunas dalias he escogido los macetones de los bulbos de otoño, ya guardados a buen recaudo. Las dalias rosas ya han brotado, espero que aquí donde las he puesto estén a gusto y florezcan más que el año pasado.
El resto, pues tengo un montón, las pondré en el suelo, en un sitio nuevo que tengo abonado y preparado.
Aquí los gladiolos ya asomando. Los pequeños, que aún no tienen energías para florecer, los pongo en una maceta a engordar.
Gracias por leerme. Os deseo una estupenda y ya veraniega semana.
Veo que los gladiolos van un poco retrasados, yo los tengo ya florecidos al igual que las dalias, será porque no los saco cuando se marchitan las flores. Este año seguiré tu experiencia. Saludos
ResponderEliminarSi Valentín, ya lo comento, otros años aunque no florecidos han estado más creciditos. Pero ya tocaba cambiarlos de lugar. Un abrazo.
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