Al final del verano llega la cosecha de semillas en el jardín y en el huerto. Las recolecto y las dejo secar en papel absorbente unos días. Recojo más semillas del jardín porque las del huerto son más complicadas, no siempre son fiables y prefiero sembrar plantas ya crecidas. Sólo guardo semillas de melones o sandías que ya he probado que se pueden cultivar.