A principios de este mes tuvimos la oportunidad de visitar de nuevo el valle del río Jerte. Y aunque ahora no hay flores en los cerezos, si que encontramos algunas cerezas madurando todavía en los árboles y tuvimos ocasión de probarlas.
Para disfrutar del paisaje nada mejor que seguir una ruta senderista de altura para visitar el pueblo más alto de Extremadura, Piornal. La ruta comienza en el pueblo vecino de Navaconcejo y poco a poco se va subiendo, entre huertos y campos de cerezos. Conforme vamos avanzando tenemos mejores vistas del valle.
Esta ruta, llamada Camino Real, era usada para transportar cerezas, castañas y madroños, entre Piornal y Navaconcejo. Los castaños también forman parte del paisaje.
El Calderón, es uno de los saltos de agua de la Garganta Bonal, aunque ahora en agosto, no lleva agua prácticamente. Aún así el rincón donde está situado es impresionante.
Después del Calderón empieza el bosque de robles y lo que los lugareños llaman el Camino de las Viñas, un camino empedrado en los años 50 del siglo pasado que termina a la entrada del pueblo.
Y a la llegada, lo primero contemplar el paisaje del valle. Algo difícil hoy por la calima.
Paseando por el Piornal no perdemos ocasión de contemplar pequeños jardines que llaman nuestra atención.
Unos jardines son reales y otros están estampados en las paredes de estas casas.
Y para terminar esta visita, una imagen, también estampada en la pared, del Jarramplas, el personaje protagonista del día de San Sebastián en Piornal.
Espero que os haya gustado esta entrada. Apuremos el verano que ya va quedando poco. Gracias por leerme. Saludos.
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